18/03/2023
La presión arterial alta o hipertensión es una afección frecuente en la que la sangre ejerce una presión contra las paredes de las arterias y con el transcurso del tiempo puede llegar a ser lo suficientemente alta para causar graves problemas de salud, como enfermedades cardíacas.
La presión arterial se establece por la cantidad de sangre que el corazón bombardea como el grado de resistencia al flujo de la sangre en las arterias. Es decir que mientras más sangre tu corazón bombardea y mientras más estrechas estén las arterias, más elevada será la presión arterial.
Lectura de la presión arterial
La lectura de la presión arterial se establece en milímetros de mercurio que se representa con la abreviatura: mm Hg.
La presión sistólica se mide cuando los ventrículos del corazón se contrae y la diastólica cuando los ventrículos se relajan.
Una presión sistólica de 120 milímetro de mercurio se considera en el rango de los niveles normales; mientras que el rango normal de la diastólica es de 80. En términos sencillos serían 120/80 mm Hg, o 120 sobre 80. En algunas consultas médicas se puede escuchar el término 12/8 para referirse a dicha medida.
Categorías de Presión Arterial
La American Heart Association clasifica la presión arterial en 5 categorías:
1- Presión arterial normal: es la presión arterial en la que los números son inferior a 120/80 mm Hg.
2- Presión arterial elevada: esta se determina cuando los valores de las lecturas se encuentran de forma habitual, entre 120 y 129 mm Hg en caso de la sistólica y por debajo de 80 mm Hg en el caso de la diastólica.
3- Hipertensión en fase 1: esta es diagnosticada cuando la presión arterial sistólica varía con regularidad, de 130 a 139 mm Hg y la diastólica de 80 a 89 mm Hg. En esta fase es cuando los cardiólogos recomiendan hacer cambios en el estilo de vida y consideran la posibilidad de incorporar medicamentos para estabilizar la presión arterial y prevenir un posible ataque al corazón o derrame cerebral.
4- Hipertensión en fase 2: en esta categoría la presión arterial se encuentra en forma regular en rangos de 140/90 mm Hg o incluso superior. En esta fase los médicos prescriben una combinación de medicamentos para la presión arterial y cambios en el estilo de vida.
5- Crisis de hipertensión: Esta es diagnosticada cuando la presión arterial supera los valores 180/120 mm Hg, lo que requiere de una intervención médica inmediata.
La hipertensión es denominado como “el asesino silencioso” ya que a menudo la presión arterial alta no presenta señales de la misma lo que puede llegar a causar enfermedades cardiacas, derrames cerebrales, problemas oculares, insuficiencia renal, entre otro problemas de salud, incluso podría ser la causante de una muerte repentina.
Para prevenir un desenlace desafortunado, lo más recomendable es realizar los chequeos rutinarios con su médico familiar o de cabecera, sin importar la edad, ya que si se detecta alguna anomalía en su presión arterial lo más probable sea referido a unos de los cardiólogos en República Dominicana, quien le dará un seguimiento más cercano.
Principales síntomas que presenta Presión Arterial Alta
Según informaciones el 90% de las personas hipertensas no presentan síntomas, por lo que esta puede ser detectada durante una visita rutinaria, solo el 10% de la población mundial experimenta algunas señales de dicha enfermedad. Entre los síntomas más frecuente de presión arterial alta figuran: dolor de cabeza y cuello, mareos frecuentes, manchas de sangre en los ojos, presión en el pecho, palpitaciones, taquicardia, colesterol alto y problemas de erección.
Tienes mayor riesgo de sufrir de presión arterial alta cuando:
- Es afroamericano
- Es Hombre
- Tiene Sobrepeso u obesidad
- Sufre de estrés o ansiedad
- Consume mucha sal
- Tiene antecedente familiar de hipertensión arterial
- Tiene diabetes
- Fuma
Recomendaciones:
Para mantener un corazón saludable, lo recomendable es seguir con hábitos sanos, como una dieta equilibrada y actividades físicas, tanto si es hipertenso como si no lo es.
¿Cómo Prevenirla?
Aunque la hipertensión arterial no puede ser definitivamente curada, existen una serie de hábitos de vida que, unidos a la acción de los medicamentos antihipertensivos, pueden llegar a controlarla de forma sustancial y evitar así sus consecuencias. A continuación le damos una serie de consejos de gran utilidad para la prevención de la hipertensión y su control.
Todo adulto de más de 40 años debe vigilar periódicamente su tensión arterial. Más aún, si sus padres o abuelos han sido hipertensos.
Muchos hipertensos han normalizado su tensión arterial al lograr su peso ideal. Evite la obesidad.
Si su vida es sedentaria y físicamente poco activa, descubra el placer del ejercicio físico regular y, si es posible, al aire libre. Pero recuerde que siempre debe adaptarlo a sus posibilidades reales: no haga físicamente más de lo que puede.
Disminuya el nivel de sal en la preparación de sus comidas. Evite, además, los alimentos salados.
Reduzca al mínimo las grasas animales de su dieta y hágala rica en verduras, legumbres, frutas y fibras.
No fume y evite los ambientes contaminados por humo de tabaco. Invite a la gente de su entorno a dejar de fumar.
Modere el consumo de bebidas alcohólicas. No tome más de uno o dos vasos de vino al día y, a lo sumo, una bebida alcohólica a la semana.
No ingiera en exceso bebidas excitantes como el café, el té, etc.
Siga fielmente el tratamiento prescrito por su médico y no lo interrumpa sin su conocimiento. Observe los posibles efectos secundarios atribuibles a los fármacos y coménteselos a su médico.
Recuerde que la hipertensión es un poderoso factor de riesgo cardiovascular que se potencia cuando se asocia al colesterol elevado, diabetes o ácido úrico. Procure controlar, además de sus niveles de tensión, estos otros factores de riesgo citados.
