19/10/2022
Un nuevo estudio reveló que los hijos de mujeres que desarrollaron diabetes en el embarazo tienen riesgo de tener sobrepeso a los 11 años.
La investigación halló también que los hijos de mujeres obesas son más propensos a tener problemas con el peso que los niños de mujeres delgadas.
“El mejor consejo es adelgazar y mejorar la aptitud física antes de quedar embarazada”, dijo a Reuters Health la doctora Lois Jovanovic, del Instituto de Investigación de Diabetes Sansum, en Santa Bárbara, California, que no participó en el estudio.
Recientemente, la primera dama de Estados Unidos Michelle Obama lanzó un plan de acción contra la obesidad infantil. La primera en la lista de recomendaciones es la necesidad de insistir en la importancia de comenzar el embarazo con un peso saludable y mantenerlo durante la gestación.
El nuevo estudio, consideró Jovanovic, ofrece datos obtenidos adecuadamente que avalan esa recomendación. “Para prevenir la obesidad en la próxima generación, tenemos que trabajar mucho con las mujeres en edad reproductiva”, señaló.
La diabetes que aparece durante el embarazo, sin que existan antecedentes familiares de la enfermedad, se llama diabetes gestacional. Hasta el 8 por ciento de las embarazadas desarrollará la enfermedad. Tener sobrepeso y los genes “indicados” se combinan para formar un factor de riesgo clave.
Los hijos de mujeres con diabetes gestacional suelen pesar más que otros niños al nacer.
En el nuevo estudio, el equipo de la doctora Sandra Hummel, de la Universidad Técnica de Munich, Alemania, determinó el efecto de la diabetes gestacional y el peso materno en el riesgo de los bebés de tener sobrepeso en la niñez y de desarrollar resistencia a la insulina, precursora de la diabetes.
Los autores analizaron datos de dos grandes estudios en Alemania sobre un total de 1.420 niños nacidos entre 1989 y el 2000.
De ellos, 232 eran hijos de mujeres con diabetes gestacional, 757 de mujeres con diabetes tipo I o dependiente de insulina y 431 de madres sin diabetes. Los médicos les extrajeron muestras de sangre y les realizaron mediciones corporales hasta los 14 años de edad.
El equipo observó que el peso materno al comienzo del embarazo fue el principal predictor del sobrepeso y de la resistencia a la insulina en los hijos.
A los 2, 8 y 11 años de edad, muchos más hijos de mujeres obesas que de mujeres delgadas tenían sobrepeso, publicó el equipo en Diabetes Care.
A los 11 años, por ejemplo, el 46 por ciento de los hijos de mujeres obesas tenía sobrepeso, a diferencia del 12 por ciento de los hijos de las mujeres delgadas.
El 31 por ciento de los hijos de mujeres con diabetes gestacional tenía sobrepeso a los 11 años, a diferencia de menos del 16 por ciento de los hijos de mujeres sin la enfermedad o con diabetes tipo I.
El hecho de que una madre fuera diabética explicó sólo parcialmente la tendencia de su hijo a tener sobrepeso.
Agregar la obesidad a la ecuación marcó una gran diferencia, por lo cual el equipo concluyó que los hijos de mujeres obesas con diabetes gestacional estarían programados desde el útero a tener sobrepeso y a ser más propensos a desarrollar diabetes tipo II.
Eso se debería a “una combinación de la herencia genética con una programación prenatal”, dijo Hummel a Reuters Health.
Fuente: Reuters